Hace más de 300 años que en México se produce mezcal.

Fue el primer destilado que se produjo de manera ancestral, el cual antes de ser una bebida nuestros ancestros lo utilizaban de manera medicinal, al no descubrir aún su destilación correcta por sus altos contenidos de alcohol era utilizado para curar heridas, quitar dolores por lesiones después de batallas o largas caminatas cuando emigraban e incluso se utilizaba como anestesia bebiéndose para así no sentir dolor por algún padecimiento o enfermedad, lo que sucedía realmente es que estaban borrachos, pero aún no lo sabían.

 

Tiempo después descubrieron una forma de destilar el mezcal, esto se hacía en recipientes de barro, su destilación era muy lenta pero efectiva, tan lenta que adoptaba el sabor del barro y eso lo hacía un tanto agradable para beberlo. Fue así como nació el mezcal ancestral, es llamado así ya que fue la primera forma de destilar que nuestros ancestros descubrieron, y en honor a ellos es denominado mezcal ancestral.  No fue sino hasta que llegaron los españoles a México que nos enseñaron (sin querer) cómo destilar mezcal, ya que ellos destilaban sus bebidas alcohólicas (brandy) en grandes alambiques de cobre, y claro si se podía destilar brandy, entonces también se podría el mezcal. Es así como nace el mezcal artesanal.

 

En la actualidad se ha ido transformando el proceso, se destila también en alambiques de acero inoxidable, su proceso sigue siendo artesanal pero sus sabores cambian bastante.

 

El mezcal fue el primer destilado descubierto, con el tiempo en otras regiones producían mezcal y cambiaban un tanto el proceso y con ello cambiaron el nombre, raicilla, sotol, bacanora, lechuguilla, e incluso el tequila, si, el tequila es un mezcal! Todo destilado proveniente del agave (maguey) es mezcal.